¡Felicitaciones eres bienvenido!

Querid@ amig@, recibe mi cordial saludo; de alguna manera, tu visita al Blog, no es casualidad sino que es CAUSAL, sí, así como lo afirmo, es propio de la causa que mueve nuestras propias sensaciones en este hermoso Universo creado por un SER SUPREMO. Aquí eres bienvenid@ sin distingo de raza, credo o religión ni status social... ¡Somos herman@s e hij@s de la misma creación! ... Y teniendo en cuenta que en el crecimiento personal, la libertad de credo, de pensamiento y de expresión, y el respeto por la diferencia constituye un factor importante de amor y comprensión; por tal, lo que se expone en este blog puede ser de su interés, tal y como lo es para quien lo administra.

jueves, 3 de octubre de 2013

El ego y el momento presente

 

La relación más importante y primordial de la vida es la relación con el Ahora, o mejor aún, con cualquiera que sea la forma que adopte el Ahora, es decir, lo que es o lo que sucede. Si la relación con el Ahora es disfuncional, esa disfunción se reflejará en todas las relaciones y en todas las situaciones de la vida. El ego podría definirse sencillamente como una relación disfuncional con el momento presente.

Es en este momento cuando podemos decidir la clase de relación que deseamos tener con el momento presente.

Una vez que hemos alcanzado un cierto nivel de conciencia, es decir, de Presencia (y si está leyendo esto es porque seguramente es su caso) estamos en capacidad de decidir qué clase de relación deseamos tener con el momento presente.

¿Deseo que éste momento sea mi amigo o mi enemigo? El momento presente es inseparable de la vida, de tal manera que nuestra decisión se refiere realmente a la clase de relación que deseamos tener con la vida. Una vez tomada la decisión de ser amigos con el momento presente, nos toca dar el primer paso: mostrarnos amigables con él, acogerlo independientemente de su forma de presentarse. Y no tardaremos en ver los resultados. La vida se torna amable con nosotros. La gente nos ayuda y las circunstancias cooperan. Pero es una decisión que debemos tomar una y otra vez, hasta que aprendemos a vivir naturalmente de esa manera.

Con la decisión de hacer amistad con el momento presente viene el fin del ego. El ego no puede nunca estar en consonancia con el momento presente, es decir, en consonancia con la vida, puesto que su propia naturaleza lo induce a resistir, menospreciar o hacer caso omiso del Ahora. El ego se nutre del tiempo. Mientras más fuerte el ego, mayor es el tiempo durante el cual controla nuestra vida. Casi todos nuestros pensamientos entonces se refieren al pasado o al futuro y el sentido de lo que somos depende del pasado, donde encuentra una identidad, o del futuro donde busca su realización. El temor, la ansiedad, la expectativa, el remordimiento, la culpa, y la ira son disfunciones del estado de la conciencia atrapado en el tiempo.

El ego trata el momento presente de tres maneras: como un medio para una finalidad como un obstáculo o como un enemigo. Analicemos una a la vez, de tal manera que cuando ese patrón se apodere de usted, pueda reconocerlo y decidir nuevamente.

En el mejor de los casos, el ego ve en el momento presente un medio para cumplir una finalidad. Sirve para llevarnos a algún momento en el futuro considerado más importante. Pero el futuro nunca llega salvo como momento presente y, por tanto, no es más que un pensamiento en la cabeza. En otras palabras, nunca estamos totalmente aquí porque siempre estamos ocupados tratando de llegar a algún otro lugar.

Cuando este patrón se acentúa, lo cual suele suceder, el momento presente es visto o tratado como si fuera un obstáculo a superar. Es allí donde surgen la impaciencia, la frustración y el estrés y, en nuestra cultura, esa es la realidad cotidiana, el estado normal de muchas personas. La Vida, la cual ocurre ahora, es vista como un “problema”, y todos habitamos en un mundo lleno de problemas que debemos resolver para ser felices, sentirnos realizados o comenzar realmente a vivir (o por lo menos eso creemos). El problema está en que, por cada problema que resolvemos aparece uno nuevo. Mientras veamos un obstáculo en el momento presente, los problemas no tendrán fin. “Seré lo que deseas que sea”, dice la Vida o el Ahora. “Te trataré como tú me trates. Si me ves como un problema, eso seré para ti. Si me tratas como a un obstáculo, seré un obstáculo”.

En el peor de los casos, y esto también es muy común, el momento presente es visto como un enemigo. Cuando odiamos lo que hacemos, nos quejamos de nuestro entorno, maldecimos de las cosas que suceden o han sucedido; o cuando nuestro diálogo interno está lleno de lo que deberíamos o no deberíamos hacer, de acusaciones y señalamientos, entonces nos peleamos con lo que es, con aquello que de todas maneras ya es como es. Convertimos a la Vida en nuestra enemiga y ella nos dice, “si lo que quieres es guerra, guerra tendrás”. La realidad externa, la cual es siempre el espejo de nuestro estado interior, se experimenta como algo hostil.

Una pregunta crucial que debemos hacernos con frecuencia es ¿cuál es mi relación con el momento presente? Después debemos estar alertas para descubrir la respuesta. ¿Trato el Ahora apenas como un medio para llegar a una finalidad? ¿Lo veo como un obstáculo? ¿Lo estoy convirtiendo en enemigo? Puesto que el momento presente es lo único que tendremos, puesto que la vida es inseparable del Ahora, lo que la pregunta significa realmente es, ¿cuál es mi relación con la vida? Esta pregunta es una forma excelente de desenmascarar al ego y de entrar en el estado de Presencia. Aunque la verdad absoluta no está encarnada en la pregunta (en últimas, yo y el momento presente somos uno), es una guía importante hacia el camino correcto. Hágase esa pregunta con frecuencia, hasta que ya no la necesite.

¿Cómo trascender una relación disfuncional con el momento presente? Lo más importante es reconocerla en nosotros mismos, en nuestros pensamientos y en nuestros actos. Estamos en el presente en el momento mismo en que notamos que nuestra relación con el Ahora es disfuncional. Ver equivale al afloramiento de la Presencia. Tan pronto como vemos la disfunción, ésta comienza a desvanecerse. Algunas personas se ríen cuando ven esto. Con el reconocimiento viene el poder de elegir: la posibilidad de decirle “sí” al Ahora y de aceptarlo como amigo.



Eckhart Tolle




Fuente: http://www.cienciacosmica.net/news/el-ego-y-el-momento-presente-por-eckhart-tolle/
 

miércoles, 2 de octubre de 2013

Las Doce Responsabilidades de la Maestría

Las Doce Responsabilidades de la Maestría

 
1. AUTO-MANIFESTACION: Liberarse del “Juego de Culpabilidad Víctima-Victimario” y tener la disposición para asumir con responsabilidad todas las manifestaciones percibibles como proyecciones directas de un aprendizaje previsto aprendiendo desde la conciencia personal / Impronta o Plantilla del ADN.

2. AUTO-SOBERANÍA: Liberarse de la necesidad de ser aprobado o de rebelarse contra cualquier forma de “autoridad externa” a través de comprender que usted, como manifestación del Espíritu Divino, tiene la capacidad de co-crear su propia libertad personal sin violar los derechos espirituales de los demás y sin permitir que otros violen su derecho espiritual a Ser.

3. AUTONOMÍA: Asumir la responsabilidad personal y tener presente que en todo momento, solo usted es el único responsable de la forma como decida ENCAUSAR SUS ENERGÍAS PERSONALES. Nada ni nadie tiene el poder de “afectarlo o perturbarlo” para justificar o validar respuestas o reacciones, ideas, intenciones o acciones personales de tipo espiritual. Es USTED quien “se auto-afecta”, permitiendo al cuerpo emocional seguir las percepciones erróneas del cuerpo mental que le dicen que su poder reside fuera de usted mismo. En todo momento, usted está en capacidad de ELEGIR el tipo de palabras, asociaciones e ideas que usará como filtros a través de los cuales interpretar una situación.
“LA AFECTACION”, “EL ENFADO”, “LA OFENSA” o cualquier otro rótulo (conciente o inconciente) son todos FILTROS DEL CUERPO MENTAL que dirigen la función de los cuerpos físico y emocional. El individuo auto-suficiente reconoce que en todo momento existe la libertad de interpretación. Así, una experiencia “negativa” y sus energías inarmónicas derivadas de sentimientos “de enfado” solo pueden existir como una interpretación personal de las cosas.
Hacerse menos responsable por la dirección de las energías personales, lo pondrá directamente en el “Juego de Culpabilidad” Víctima-Victimario, lo cual solo puede tomar lugar entre aquellos que entregan su poder y responsabilidad personales de manifestación a fuentes externas. Solo usted tiene el poder de “auto-afectarse”.
Independientemente de lo que otros hagan o digan, usted está en pleno derecho de ejercer su propia interpretación. Nada ni nadie tiene el poder para perturbarlo a menos que usted le ceda su poder.
La autonomía deviene cuando uno reconoce que la dirección de las energías personales, sean físicas, emocionales, mentales (ideas, creencias, interpretaciones, etiquetas), concientes o inconcientes, es un logro de maestría personal y existe a modo de responsabilidad implícita y se acompaña del don del libre albedrío. A mayor responsabilidad asumida, mayor libertad y empoderamiento personales.

4. AUTO-DISCIPLINA: Al aceptar la responsabilidad del direccionamiento de nuestras energías personales, en lugar de oponerse a ellas, mayores resultados se podrán experimentar. El cuerpo físico, mental y emocional han sido direccionados durante mucho tiempo por las fuerzas subconscientes de la “sombra” oculta, creando en nuestro interior presiones, reacciones, pensamientos, impulsos, percepciones y sentimientos que trabajan frecuentemente contra las creaciones de la vida que deseamos manifestar. Parte de la maestría espiritual conlleva el enseñarnos a nosotros mismos cómo permanecer concientemente alertas mediante la observación del lenguaje de nuestra mente, emociones y cuerpo físico, de modo que podamos emplear una redirección conciente de las energías sombrías subconscientes que funcionan en “piloto automático”.
Si aprendemos a “estar alertas” en el momento que ciertos patrones o emociones de pensamiento “negativo” toman lugar, podemos usar ese momento de reconocimiento para reclamar esta energía errante y usar concientemente el poder de cambio para asumir una actitud afirmativa, usar las palabras adecuadas y redireccionar la energía para encausar las energías opuestas del Ser hacia el cumplimiento de creaciones constructivas y espiritualmente maduras. Se requiere de auto-disciplina para convertirse en el “domador del león” de la mente subconsciente que frecuentemente ruge, poseyendo el poder intrínseco de ayudar a que la sombra de nuestro subconsciente evolucione a través del amor pero con un redireccionamiento firme, haciendo que ese león se convierta en un “gato mimoso” que se unirá felizmente a nosotros en nuestras co-creaciones constructivas. La auto-disciplina emerge cuando nos recordamos emplear consistentemente los pensamientos, acciones o actitudes “Espiritualmente Correctos”, incluso aunque no “nos gusten” cuando la sombra empieza a acercarse sigilosamente desde “bien abajo”. La sombra parte de la superficie del Ser de modo que podamos ver estas partes del Ser venir a la mente conciente para sanarnos. A través de este proceso, la misma mente conciente puede aprender los mayores atributos de la maestría.

5. AMOR-PROPIO: Es nuestra responsabilidad amar y nutrirnos a través del don ilimitado del Espíritu Divino que se mueve a través nuestro en todo momento. El amor auténtico debe llegar desde dentro y solo puede obtenerse a través de una conexión espiritual auténtica con el Ser-Divino eterno y su inherente conexión con toda la creación. Si buscamos amor “fuera” de nosotros para satisfacer una soledad personal o carencia interior, podemos establecer relaciones de tipo “vampiro energético”. Aquí se trata de buscar un sustituto de conexión con nuestra Fuente-Divina personal tratando de acceder a la Fuente-Divina encarnada dentro de otras personas o seres. Esto no es “AMOR”. Es “NECESIDAD”. Esto implica una “CARENCIA” de algo esencial, lo cual a su vez, implica una conexión personal limitada con la Conciencia Universal de la Fuente Divina.
Dicha carencia no puede suplirse mediante el “amor” externo. Solo puede suplirse mediante el reconocimiento del Dios dentro nuestro y reconociendo que somos la encarnación viva del amor absoluto. Una vez reconocido esto, usted POSEERÁ el mayor amor de todos, el Amor de Dios y desde esta Posición de Poder Divino, podrá usted sumergirse en el mundo para buscar a aquellos a quienes brindar este amor, en lugar de buscar a aquellos de quienes pueda “tomar” amor. Cuando el amor se aborda a través del Amor Propio, la motivación es ofrecerlo con gozo, sabiendo que cualquier cosa que pueda necesitar, podrá hacerse manifiesta a través del Amor de la Fuente Divina activa que usted porta dentro de sí. El Amor Propio es una responsabilidad de madurez espiritual.

6. INTEGRIDAD ESPIRITUAL: Es de nuestra absoluta responsabilidad elegir actuar con integridad espiritual todo el tiempo.
NO EXISTE EXCUSA PARA VIOLAR CONCIENTEMENTE LOS DERECHOS ESPIRITUALES DE LOS DEMAS, A PESAR DE SUS DEFICIENTES RESPUESTAS FRENTE A USTED.
La integridad espiritual requiere que empecemos a OBSERVAR lo que REALMENTE estamos haciendo en la forma como vivimos nuestras vidas.
¿Afectan nuestros hábitos alimenticios el reino vegetal o animal de la Tierra? ¿SE DEMUESTRA RESPETO EN LA FORMA DE ELEGIR LAS PALABRAS Y ACCIONES HACIA LAS DEMÁS PERSONAS Y FORMAS DE VIDA?
¿Jugamos a la supervivencia del más fuerte frente al más débil para darnos a nosotros mismos una excusa de comportamiento no ético en asuntos monetarios, tales como demostrar nuestra rebelión silente contra el gobierno tratando de “engañar” en asunto de impuestos o “poniendo en evidencia” a un compañero de trabajo para probar que usted tiene mayores méritos y facultades para salir favorecido? ¿Le dice usted a la gente lo que ellos desean escuchar con el fin de obtener su aprobación y respaldo, incluso aunque no sea totalmente cierto y no refleje sus necesidades o sentimientos personales? ¿Trata usted de “hacer que los demás pongan su parte” realizando su propio trabajo o responsabilidades? ¿Usa usted excusas erróneas de tipo racial, género, credo, situación académica o económica para justificar un tratamiento irrespetuoso, explotador o lesivo para con otros?
La integridad espiritual requiere que asumamos siempre una posición firme y una mirada frecuente sobre la forma de conducir nuestras vidas, hacer frente a aquellas áreas de actividad donde se utilizan estilos espiritualmente incongruentes y desplegar un compromiso y disciplinas activos para hacer que estas áreas de nuestras vidas sean Espiritualmente Íntegras. Uno no “ingresa a las puertas del Cielo” (o a cualquier otro lugar que se quiera) a través de usar excusas para no emplear una Integridad Espiritual auténtica.
Cultivar la integridad espiritual es una responsabilidad mayor en el sendero de la maestría espiritual y la forma como el universo trabaja. Usted “no puede salir de casa sin ella”. Esto significa que existe una realidad biológica de integridad espiritual que se manifiesta químicamente dentro del ADN como un resultado de dicho estado y enfoque de conciencia. Si usted no posee una cantidad suficiente de integridad espiritual en su conciencia ni en su plantilla de ADN, y aunque pueda “tomar del pelo a otros”, su propia biología será finalmente la que dictamine el trabajo hacia su propia maestría. El paso a través de la puerta estelar requiere de una suficiente cantidad de conciencia de integridad espiritual químicamente codificada.

7. APRECIACIÓN: Nuestra sociedad actual continuamente nos enseña a “desear más”, “necesitar más”, “ser más”, “hacer más”, etc. Somos constantemente influidos a percibir lo que está ‘faltando’ para motivarnos a comprar más, trabajar más, pagar más impuestos y ser una “buena oveja consumista”. Muy raramente nos detenemos a pensar en TODO lo que tenemos, empezando con el don de la Vida y el libre albedrío mental. A través de ese filtro perceptual desvirtuado, empezamos a cultivar una mutación ‘desarrollada’ de conciencia mental.
Y con este cambio de conciencia, empezamos a creer que “tenemos derecho a compensación”, que “alguien NOS DEBE” (DIOS, el Universo, nuestros padres, cónyuge, hijos, empleador, gobierno, etc…). Una vez caemos en esta trampa mental del “Usted ME DEBE”, nos afectamos al continuar una frustración auto-impuesta, mientras que fijemos expectativas irreales e inciertas sobre la vida, los demás y nosotros mismos. A menudo podríamos enfadarnos o herir a otros cuando encontramos que el universo no encaja con nuestras “representaciones” figuradas.
“NADIE NOS DEBE NADA”.
Si sentimos que se nos “debe”, entonces estamos recibiendo una CONCIENCIA DE CARENCIA y un vacío dentro del Ser está siendo reconocido. Si damos a otro con el fin de RECIBIR para nosotros mismos (como lo hacen los bancos y con frecuencia los padres, cónyuges o amantes), y el otro no “devuelve” lo que esperábamos recibir, podemos sentir que se nos “engaña”, “se aprovechan” o “están en deuda”. De hecho, estas situaciones emergen con frecuencia en nuestras vidas como lecciones para enseñarnos que el acto de dar debe hacerse SOLO DANDO, y no por el beneficio esperado. Si damos lo que deseamos dar por el solo gozo de dar, no sentiremos que se nos deba. Si vivimos por el gozo de dar, sin forzar nuestras exigencias o expectativas de la vida, no sentiremos “la escasez en nuestras vidas!”
No importa lo que su vecino posea porque al compararnos entre sí para “medimos” mutuamente, estamos siendo, en efecto, continuamente distraídos para no ver y utilizar las bendiciones que son nuestras. Podemos trabajar para cultivar la habilidad de APRECIAR incluso el más pequeño de los dones, bendiciones y gestos, y así empezaremos a crear una vida que por lo menos sea “medio llena” y no “medio vacía”. En términos de física universal, hacia donde enfocamos nuestra atención, eso atraemos; lo que resista, persiste y a aquello hacia lo cual no se da la energía de la apreciación, no se manifestará el derecho a ser experimentado.
Cuando usted aborda el mundo a través del filtro elegido de un acto genuino de DAR, usted se convierte, en efecto, en un “transmisor eléctrico”, enviando energía al mundo alrededor suyo. Al liberar energía eléctrica en esta forma, usted se torna más “magnético”, puesto que el envío de energía crea vórtices magnéticos al interior de la Rejilla Diódica de su anatomía kathara. Los puntos diódicos “magnetizados despliegan entonces un mayor suministro de energía universal en una frecuencia y calidad de energía superior, con el fin de re-llenar el vacío energético creado mediante el acto de “dar”. Cuando usted enfoca el mundo con la actitud de “obtener”, este proceso físico natural se invierte. Entre más trate de “obtener” energía del mundo exterior, mayor cantidad de energía queda “atascada” en la Rejilla Diódica en forma de miasmas. Los miasmas reducen progresivamente la cantidad y disminuyen la frecuencia de las energías naturales que usted pueda internamente extraer de la fuente universal. El dar, incluso en la forma más simple de dispensar apreciación, conserva el flujo de energía natural.
Cualquiera sea lo dado por usted, le será retornado de manera amplificada. Sin embargo, esto también trabaja en reversa y cuando se ofrece una fea actitud, arrogancia y/o “basura” egoica, fluirá más de lo mismo en su camino. Aprecie lo que tiene. ÁMELO, encuentre perspectivas a través de las cuales su gozo pueda ser conocido, y sepa que en el acto de la apreciación genuina por sí misma, usted empezará a soltar los poderes para manifestar más de lo que desea y menos de la ilusión de carencia. La trampa mental: el “Universo Me Debe”, es uno de los juegos de auto-sabotaje más poderosos en el mundo. Cámbielo por una apreciación consistente y su mundo se expandirá progresivamente para sostener la realidad de las cosas que usted más desea. Si siente que el mundo se aprovecha de usted y se resiente por tener sus deseos insatisfechos, USTED SE ESTÁ DEBIENDO ALGO! Usted se debe a sí mismo una mayor comprensión de la naturaleza de la creación y un mejor uso de su poder personal dentro del juego de la creación de la vida. AGRADEZCA a la FUENTE DIVINA con mayor frecuencia… para ayudarse a recordar qué cosas tiene que apreciar y muchas más de ese tipo serán dispuestas a lo largo de su camino.

8. PACIENCIA: La Fuente Divina tiene su propia agenda! Podemos, o bien reconocer esta realidad intrínseca de manifestación y elegir trabajar de modo co-creativo con la Fuente Divina interna, confiando en que conjuntamente, usted y el universo crearán el “Tiempo Divino Perfecto” (y si el AHORA no es el momento “Correcto”, EXISTE una buena razón para ello) o permitir que el ego propio trate de forzar su voluntad sobre la naturaleza intrínseca del tiempo.
Si el tiempo no coopera con sus expectativas, puede “permitirse asumir que eso está BIEN y confiar en el Tiempo Divino Correcto” o frustrarse progresivamente con el apego al tiempo artificial de los relojes y elegir creer que no puede tener lo que desea solo porque no aparece cuando usted lo solicita. Si aprendemos a relajarnos y comprender que la mayoría de las cosas que deseamos podemos lograrlas de hecho en el Tiempo y Orden Divinos Correctos, podemos aprender a trabajar co-creativamente con la conciencia del tiempo. Entonces podremos encontrar con frecuencia que nuestras vidas se conformarán cada vez más con nuestros deseos, especialmente cuando pedimos amablemente y no cuando EXIGIMOS, y también cuando confiamos que la Fuente Divina universal desarrolla su parte en nuestra co-creación. La paciencia es una virtud que refleja nuestra comprensión de la naturaleza del Orden Universal.

9. BONDAD: Al igual que el Respeto, la Bondad es un derecho de nacimiento, y sin embargo es frecuentemente pasada por alto y mal interpretada. Cuando consideramos el mundo con un corazón genuinamente bondadoso, que envía amor y respeto hacia toda la creación haciendo honor a la Fuerza Divina que vive dentro de todas las cosas, estamos, de nuevo, transmitiendo energía eléctrica desde una frecuencia más elevada que seguirá la mecánica de la física universal para atraer mas de eso mismo a nosotros a través del flujo universal del retorno.
La Bondad implica ser conciente y solícito de las necesidades, sentimientos y deseos propios y de los demás; expresar esta preocupación y demostrarla mediante una correcta acción, actitud e intención. Regálese a sí mismo actos de generosidad al azar y luego transmita este regalo a todos los que se encuentre en el camino. Trate de ser generoso con el vecino promedio y con el vecino gruñón y ayúdeles a redescubrir la capacidad de reír. Cuando tratamos todas las cosas con bondad, demostramos que reconocemos su valor intrínseco como manifestaciones de la Fuente Divina y frecuentemente encontraremos que la amorosa Fuente Divina retorna el favor.

10. CONSERVACIÓN: La conservación es una forma de respeto y apreciación hacia la energía de la Fuente Divina en todas sus expresiones, desde conservar y proteger nuestros recursos naturales, el cuidado de las necesidades de nuestro cuerpo y hasta el uso de la energía de nuestras palabras y acciones mediante una sana conservación mediante la cual usamos libremente lo que se requiere, no más. La Fuente Divina recicla continuamente sus energías para el resurgir de una nueva expresión. Todo se entrega libremente pero nada carece de valor o está echado a perder. La conservación demuestra que tenemos respeto y apreciación por el regalo que la energía creativa de la Fuente Divina nos ha provisto. Mientras aprendamos a usar esta energía en todas sus formas con respeto e intención pura, progresivamente afinaremos nuestra habilidad para crear lo que deseamos, y en este proceso asistimos a todos los seres a hacer lo mismo. Hay verdad en el viejo dicho: “Quien no malgasta, no pasa necesidades”. Si todo lo que percibimos en nuestro holograma de vida es entendido como una manifestación de la Fuente Divina, podríamos emplear un poco más de respeto, apreciación y conservación hacia el uso y aplicaciones de las energías Divinas.

11. COOPERACIÓN Y DIPLOMACIA: La existencia es y será siempre un esfuerzo co-creativo. Debemos estar dispuestos a permitir a otros seres la satisfacción de sus necesidades y deseos si esperamos tener nuestros logros. Crear mediante la actitud de “Ganar-Ganar” y crear con la intención de DAR genuinamente son formas naturales de ser. No podríamos siempre estar conformes con las creaciones dirigidas por otros, y todos tenemos derecho a nuestros puntos de vista. La diplomacia puede ser un puente entre las fuerzas de la oposición, a través de la cual pueden lograrse acciones o decisiones efectivas para apoyar mutuamente cada perspectiva. Podemos aprender a conciliar estar en desacuerdo respetuosamente, de modo que el Arte Espiritual de Co-creación Co-operativa pueda evolucionar progresivamente hacia niveles de expresión más elevados.

12. SENTIDO: Aprender a identificar y aplicar apropiadamente tanto el “Sentido Común” como el “Sentido No Común” del saber espiritual nos permitirá establecer el mayor balance de expresión de la energía al interior de todos los aspectos de nuestras vidas.


Traducido por: Gloria Helena Restrepo C. yosoyjanaya@gmail.com
Derechos de autor A’shayana & A’zahyana Deane, 1997-2008. Todos los Derechos Reservados. Parte de la Serie MCEO Freedom TeachingsTM

Fuente en Internet: http://www.cienciacosmica.net/news/las-doce-actitudes-y-responsabilidades-de-la-maestria/

martes, 24 de septiembre de 2013

Frases de amor, por Marcela Parolin


"Transformarse implica aceptar lo que es, exponerse y trabajar de manera comprometida y responsable para lograr ese cambio que deseamos suceda en nuestras vidas. Es bueno y aconsejable pedir ayuda cuando sólo no se logra, sin embargo hoy día podemos observar cantidad de adictos a talleres y seminarios que cuando llegan a su casa sólo buscan cuál será el próximo curso, se han convertido coleccionistas y dependientes. La verdadera transformación no podrá llegarte desde el exterior, sucederá cuando te enfrentes al espejo y tomes acciones que sólo hacen a tu propio equilibro en lo espiritual, emocional y físico."
"Cada vez que hacemos una elección estamos invirtiendo energía a favor o en contra de nuestra naturaleza que es esencialmente amorosa. Observemos que algunas elecciones pueden favorecernos hoy pero demorarnos temporalmente del camino de regreso a la Fuente. Haciendo uso de nuestro libre albedrío, siendo conscientes de nuestra responsabilidad en la misión elegida y con un poco de voluntad alcanzaremos la armonía que nos lleva a la plenitud. Se puede y depende sólo de ti. reflexiona antes de elegir."
"¿Cómo pretender que te amen si ni tú mismo aceptas ni bendices lo que eres? Que estoy gordo, que soy bajo, que soy moreno... Eres AMOR, eres una Chispa Divina dentro de ese instrumento que es tu cuerpo humano, muéstrate al Universo desde ese lugar y recién en esa instancia sentirás lo poderoso que eres."
"Si sientes que alguien está perturbado y sigues evocando a esa persona de manera negativa, ten presente que tus pensamientos son vibraciones que le llegarán y nublarán aún más su mente. Anímate al desafío de proyectar Luz sobre los que consideras tus enemigos, porque en realidad están siendo tus maestros."
Estan son frases de Marcela Parolin que han sido publicadas. 
Siéntete libre de compartirlas, recuerda citar la fuente: ¡Refleja tu amor al Universo! www.refleja.com
Unete a nosotros en Facebook: http://www.facebook.com/reflejatuamor y sigue a Marcela: http://www.facebook.com/MarcelaParolinII

martes, 17 de septiembre de 2013

VIVIR EN PLENITUD. Por: Raquel Arrizabalaga

VIVIR EN PLENITUD nos ayudará a recordar nuestra divinidad.
 La señora Louise Hay nos enseñó hace muchos años que hay cuatro emociones negativas que nos enferman: la crítica, la culpa, el resentimiento y el miedo.
 Cada vez que actuamos a través de una de estas emociones, estamos devaluando a Dios.
 Dios nos hizo a su imagen y semejanza, por lo tanto somos seres divinos. Si me muevo a través de estas emociones estoy dando por sentado que Dios no hizo las cosas bien, lo estoy devaluando, lo estoy juzgando.
 Tenemos que recordar nuestra divinidad y ver la perfección en cada ser y en cada acto. Las cosas no suceden porque sí. Todo está perfectamente relacionado y tiene una razón de ser. Aquel viejito genio llamado Einstein lo sintetizó muy bien "DIOS NO JUEGA A LOS DADOS".
 La señora Louise Hay, llevó esas palabras al nivel humano: "CADA UNO DE NOSOTROS HACE LO MEJOR QUE PUEDE CON EL CONOCIMIENTO QUE TIENE EN ESE MOMENTO".
 Todos somos almas en proceso de evolución, todos estamos aquí para crecer, cada uno lo hace a su manera. Cada alma está recorriendo su camino de la manera que lo necesita. Algunos aprenden por dolor y otros por amor. Nosotros elegimos el camino.
 Somos seres divinos, pero no olvidemos que el otro también lo es. No juzguemos, no culpemos, no critiquemos. La gente no puede dar lo que no conoce.
 Bendiciones y amor... 
Raquel 

viernes, 13 de septiembre de 2013

LA MAESTRIA DEL AMOR, Capítulo V La relación perfecta, de Dr. Miguel Ruiz

Imagínate una relación perfecta. Siempre te sientes feliz con tu pareja porque vives con el hombre o con la mujer perfecta para ti. ¿Cómo describirías tu vida con esta persona?
Bien, la manera en que te relacionas con ella será, exactamente, la manera en que te relacionas con un perro. Un perro es un perro y hagas lo que hagas, seguirá siendo un perro. No puedes convertir un perro en un gato o en un caballo; es lo que es.
Aceptar este hecho en tus relaciones con otros seres humanos resulta fundamental. No es posible cambiar a las personas, las amas tal como son o no las amas; las aceptas tal como son o no las aceptas. Intentar cambiarlas para que se ajusten a lo que tú quieres que sean es como intentar que un perro se convierta en un gato o que un gato se convierta en un caballo. Es un hecho: son lo que son y tú eres lo que eres. Bailas o no bailas. Es necesario que seas completamente sincero contigo mismo: decir lo que quieres y ver si estás dispuesto a bailar o no. Entiéndelo bien, porque es muy importante. Cuando realmente comprendas, probablemente serás capaz de ver lo que es verdad para los demás y no sólo lo que tú quieres ver.
Si tienes un perro o un gato, piensa en cómo te relacionas con él. Supongamos, por ejemplo, que es un perro. El animal sabe qué hacer para tener una relación perfecta contigo. Cuando tu perro hace algo mal ¿cómo reaccionas ante él? A un perro no le importa lo que tú hagas; sencillamente te ama. No tiene ninguna expectativa. ¿No es maravilloso? Pero ¿qué ocurre con tu novia, tu novio, tu marido o tu mujer? Tienen muchas expectativas y cambian continuamente.
El perro es responsable de la mitad de su relación contigo. Esa mitad de la relación, la del perro, es completamente normal. Cuando llegas a casa, te ladra, mueve la cola y jadea porque se siente muy feliz de verte. Hace su parte realmente bien y tú sabes que es el perro perfecto. Tu parte también es casi perfecta. Te ocupas de lo que es responsabilidad tuya; lo alimentas, cuidas de él, juegas con él. Le quieres incondicionalmente; harías casi cualquier cosa por tu perro. Desempeñas tu parte perfectamente y él la suya con la misma perfección.
La mayoría de la gente es capaz de imaginarse con facilidad este tipo de relación con su perro, pero no con una mujer o con un hombre. ¿Por qué? ¿Conoces a alguna mujer o a algún hombre que no sea perfecto? El perro es un perro y tú lo aceptas así. No necesitas responsabilizarte de él para que sea un perro. El perro no intenta que tú seas un buen ser humano, un buen amo. Entonces, ¿por qué no somos capaces de permitir que una mujer sea una mujer y que un hombre sea un hombre y amar a ese ser humano tal como es sin intentar cambiarlo?
Quizás estés pensando: «Pero ¿y si no estoy con la mujer o con el hombre adecuado?». Sin duda, esta es una pregunta muy importante. Por supuesto, hay que escoger al hombre adecuado o a la mujer adecuada. ¿Y quién es el hombre adecuado o la mujer adecuada? Alguien que quiere ir en la misma dirección que tú, alguien que es compatible con tus opiniones y con tus valores emocionales, físicos, económicos y espirituales.
¿Cómo sabes si tu pareja es adecuada para ti? Imaginemos que eres un hombre y que vas a ser escogido por una mujer. Si hay cien mujeres que buscan a un hombre y cada una de ellas te considera a ti posible candidato, ¿para cuántas de esas mujeres serías el hombre adecuado? La respuesta es: no lo sabes. Esa es la razón por la que necesitas explorar y arriesgarte. Ahora bien, te puedo decir por adelantado, que la mujer adecuada para ti es la mujer que amas tal como es, la mujer que no tienes necesidad de cambiar en absoluto. Esa es la mujer adecuada para ti. Si encuentras a la mujer adecuada para ti, y a la vez, tú resultas ser el hombre adecuado para ella, serás una persona afortunada.
Tú serás el hombre adecuado para ella si ella te ama tal como eres y no quiere cambiarte. No siente la necesidad de responsabilizarse de ti; es capaz de confiar en que serás lo que afirmas ser, lo que proyectas ser. Puede ser totalmente sincera y proyectarte a ti lo que es. No se acercará a ti fingiendo ser algo que más tarde descubrirás que no es. La persona que te ama, te ama sencillamente tal como eres. Porque, si alguien quiere cambiarte, significa que no eres lo que esa persona quiere. Entonces ¿por qué está contigo?
Sabes, resulta fácil querer al perro porque él no opina acerca de ti. El perro te ama incondicionalmente. Esto es importante. Por lo tanto, si tu pareja te ama tal como eres, te ama del mismo modo que el perro. Puedes ser tú mismo con tu pareja; ser simplemente un hombre o una mujer, al igual que el perro puede ser un perro contigo.
Cuando conoces a una persona, inmediatamente después de saludarte y decirte «hola», empieza a enviarte información. A duras penas es capaz de esperar para compartir su sueño contigo. Se abre aunque ni tan siquiera sepa que lo está haciendo. Resulta muy fácil ver a cada persona tal y como es. No es necesario que te mientas a ti mismo. Ves lo que estás comprando y bien lo quieres o no lo quieres. Pero no puedes culpar a la otra persona por ser un perro o un gato o un caballo. Si quieres un perro, entonces ¿por qué te compras un gato? Si quieres un gato, entonces ¿por qué comprarte un caballo o un pollo? ¿Sabes qué tipo de mujer o de hombre quieres? El que hace que tu corazón cante, el que se alinea a tu modo de ser, el que te ama sencillamente como eres. ¿Por qué engañarte con otra cosa? ¿Por qué no conseguir lo que quieres? ¿Por qué fingir que alguien se ajusta a lo que no es? No significa que no quieras a esa persona. Significa que haces una elección y dices sí o no porque también te amas a ti mismo. Haces una elección y eres responsable de tus elecciones. Después, si esas elecciones no funcionan bien, no te culpes a ti mismo. Sencillamente, haz una nueva elección.
Pero imaginemos que te compras un perro y adoras a los gatos. Quieres que tu perro se comporte como un gato e intentas cambiar al perro porque nunca dice: «Miau». ¿Qué estás haciendo con un perro? ¡Búscate un gato! Esta es la única manera de empezar una relación maravillosa. En primer lugar tienes que saber lo que quieres, cómo lo quieres y cuándo lo quieres. Tienes que saber exactamente cuáles son las necesidades de tu cuerpo, cuáles son las necesidades de tu mente y qué se adapta bien a ti.
Existen millones de mujeres y de hombres y cada una de estas personas es única. Pues bien, de entre todas ellas, alguna será una buena pareja para ti y otras no lo serán en absoluto. Es posible amar a cualquiera; pero para tratar con una persona a diario necesitarás a alguien cuya forma de entender la vida sea más próxima a la tuya. Esa persona no necesita ser exactamente como tú; bastará con que ambos seáis como una llave en la cerradura: una unión que funciona.
Necesitas ser sincero contigo mismo y sincero con todas las personas. Proyecta lo que sientes que eres verdaderamente y no finjas ser lo que no eres. Es como si estuvieses en un mercado: te vas a vender a ti mismo y también vas a comprar. Para comprar quieres ver la calidad del género. Y por lo tanto, a la hora de vender, es necesario que les muestres a los demás lo que tú eres. No se trata de ser mejor o peor que otra persona; se trata de serlo que eres.
Si ves lo que quieres, ¿por qué no arriesgarte? Pero si ves que no es lo que quieres, ya sabes que vas a pagar por ello. Después no vayas por ahí llorando y diciendo: «Mi amante me trata mal» cuando tú mismo lo veías tan claro. No te mientas a ti mismo. No inventes en la gente lo que no tiene. Este es el mensaje. Si sabes lo que quieres, descubrirás que es exactamente igual a la relación que tienes con tu perro, sólo que mejor.
Mira lo que tienes ante ti; no te ciegues ni finjas ver lo que no está ahí. No niegues lo que ves sólo para conseguir una mercancía cuando la mercancía no se adapta a tus necesidades. Cuando compras algo que no necesitas acaba en el trastero. Lo mismo ocurre con una relación. Evidentemente, puedes tardar años en aprender esta dolorosa lección, pero es un buen comienzo. Si eres capaz de empezar bien, el resto será más fácil porque podrás ser tú mismo.
Quizá ya hayas invertido una cantidad determinada de tiempo en una relación. Si decides continuar manteniéndola, te será posible volverla a iniciar aceptando y amando a tu pareja tal y como es. Ahora bien, lo primero que tendrás que hacer es dar un paso atrás. Tendrás que aceptarte y amarte a ti mismo tal y como eres. Sólo amándote y aceptándote a ti mismo, sencillamente como eres, te será posible ser y expresar lo que eres. Eres lo que eres y no hay más. No necesitas fingir que eres otra persona, porque cuando uno finge ser lo que no es, siempre acaba fracasando.
Una vez que te has aceptado a ti mismo sencillamente como eres, el siguiente paso consiste en aceptar a tu pareja. Si decides estar con una persona, no intentes cambiar nada de ella. Haz lo mismo que con tu perro o con tu gato, permítele que sea quien ella es. Tiene derecho a ser quien es; tiene derecho a ser libre. Cuando inhibes la libertad de tu pareja, inhibes la tuya propia porque tienes que estar ahí para ver lo que tu pareja hace o deja de hacer. Pero si de verdad te amas a ti mismo, nunca renunciarás a tu libertad personal.
¿Eres capaz de ver las posibilidades que ofrece una relación? Explóralas. Sé tú mismo. Encuentra a una persona que se adapte a ti. Arriésgate, pero sé sincero. Si funciona, sigue adelante. Si no funciona, entonces hazle un favor a tu pareja y a ti mismo: márchate; permite que se vaya. No seas egoísta. Ofrécele la oportunidad de descubrir lo que realmente quiere, y a la vez, ofrécetela a ti mismo. Si no va a funcionar, es mejor mirar en una dirección distinta. Si no eres capaz de amar a tu pareja tal como es, debes saber que hay alguien que sí lo hará. No pierdas tu tiempo y tampoco le hagas perder el suyo. Eso es respeto.
Si tú eres el suministrador y tu pareja es la adicta, y eso no es lo que tú quieres, quizá te sentirías más feliz con otra persona. Pero, si decides mantener esa relación, haz siempre lo máximo que puedas. Haz lo máximo que puedas porque tú serás quien recogerá la recompensa. Si amas a tu pareja tal como es, si eres capaz de abrirle completamente tu corazón, alcanzarás el cielo a través de ese amor.
Ahora bien, si tienes un gato y lo que quieres es un perro, ¿qué hacer? Empieza a practicar desde este punto. Apunta hacia un nuevo principio, cortando todas tus ataduras con el pasado y empezando de nuevo otra vez. No necesitas mantener vínculos con el pasado. Todos nosotros somos capaces de cambiar y este cambio puede ser para bien. Se trata de un nuevo principio para ti a fin de que perdones todo lo ocurrido entre tu pareja y tú. Libéralo porque sólo se trataba de una cuestión que tenía importancia para ti. Sólo se trataba de un malentendido. Sólo se trataba de alguien herido que intentaba desquitarse. No merece la pena desperdiciar la posibilidad de alcanzar el cielo en una relación por lo que fuera que ocurriese en el pasado. Ten el valor de esforzarte el ciento por ciento en conseguirlo, y si no, libéralo. Libera el pasado y empieza cada día con un nivel más alto de amor. Esto mantendrá el fuego encendido y hará que tu amor crezca todavía más.
Por supuesto, detente a reflexionar en lo que significa tener buenos y malos momentos. Si un mal momento significa ser maltratado emocional o físicamente, no sé si la pareja debería continuar. Pero si pasar un mal momento significa que uno de los dos ha perdido el trabajo o tiene problemas laborales o que ha sufrido un accidente, eso es otra cuestión. Ahora bien, si los malos momentos provienen del miedo, de la falta de respeto, de la humillación o del odio, evidentemente no sé cuántos malos momentos es capaz de sobrevivir una pareja.
En la relación con tu perro puedes tener un mal momento por la razón que sea: un accidente, un mal día en el trabajo o cualquier otra cosa. Llegas a casa y allí está el perro ladrándote, moviendo la cola y buscando tu atención. No tienes ganas de jugar con él, pero el perro sigue ahí. Si tú no quieres jugar, él no se sentirá herido porque no se lo toma como algo personal. Una vez que haya celebrado tu llegada y descubierto que no quieres jugar con él, se pondrá a jugar él solo. No seguirá insistiendo en que seas feliz.
Hay veces, incluso, en que te sientes más apoyado por tu perro que por la pareja que quiere hacerte feliz. Si no tienes ganas de sentirte feliz y sólo quieres permanecer tranquilo, no es nada que haya que tomarse como algo personal. No tiene nada que ver con tu pareja. Quizá tienes un problema y sólo necesitas estar tranquilo. Sin embargo, tu silencio puede llevar a que tu pareja haga muchas suposiciones: «¿Qué le he hecho ahora? Es por mi culpa». No tiene nada que ver con tu pareja; no es nada personal. Si se te deja en paz, la tensión se desvanecerá y volverás a recuperar la felicidad.
Esa es la razón por la que la llave tiene que encajar en la cerradura, para que en el momento en que uno de los dos atraviese una mala racha o una crisis emocional, salga a relucir vuestro acuerdo de permitiros mutuamente ser lo que sois. De este modo, la relación es algo distinto; tiene otras características y puede ser algo realmente bello en su totalidad.
La relación es un arte. Resulta más difícil dominar el sueño que crean dos personas que el que crea sólo una. Para que los dos seáis capaces de mantener la felicidad, será necesario que mantengas tu mitad en perfecto estado. Eres responsable de tu mitad, que contiene una determinada cantidad de basura. Tu basura es tu basura. Y quien tiene que hacerse cargo de ella eres tú, no tu pareja. Si tu pareja intenta limpiar tu basura acabará con la nariz rota. Tenemos que aprender a no meter la nariz donde no nos llaman.
Y lo mismo sucede con la mitad de tu pareja. Tu pareja tiene determinada cantidad de basura. Sabes que la tiene y le permites que sea ella quien se ocupe de limpiarla. Pero la querrás y aceptarás con toda su basura. Respetarás su basura. No mantienes una relación para limpiar la basura de tu pareja; que lo haga ella misma.
Aun en el caso de que tu pareja te pida ayuda, tienes la posibilidad de decirle que no. Decir no, no significa que no la ames o que no la aceptes; significa que no eres capaz o que no quieres jugar a ese juego. Por ejemplo, si tu pareja se enfada puedes decirle: «Tienes derecho a enfadarte, pero yo no tengo por qué estar enfadado porque tú lo estés. No he hecho nada para provocar tu enfado». No hay ningún motivo para aceptar el enfado de tu pareja, pero puedes permitirle que esté enfadada. No hay ninguna necesidad de discutir; sencillamente permite que sea quien es y que se cure sin intervenir. Y también es posible convenir que ella no interfiera en tu propio proceso de curación.
Digamos que eres un hombre, que eres feliz y que, por la razón que sea, tu pareja no es capaz de ser feliz. Tiene problemas personales; está ocupándose de su basura y se siente desgraciada. Como la amas, la apoyas, pero apoyarla no significa que tú tengas que ser infeliz sólo porque ella lo es. Ese no es apoyo de ninguna clase. Si ella es desgraciada y tú también empiezas a sentirte desgraciado, al final os hundiréis los dos. Ahora bien, si tú te mantienes feliz, esta felicidad será capaz de devolverle a ella la suya.
De la misma manera, si tú te sientes deprimido y ella es feliz, esa felicidad que ella siente será tu apoyo. Por tu propio interés, permite que sea feliz; ni tan siquiera intentes rebajar esa felicidad. Ocurra lo que ocurra en tu trabajo, no llegues a casa y le eches encima tu veneno. Quédate callado y hazle saber que no se trata de nada personal; sencillamente estás ocupándote de ti mismo. Dile: «Sigue siendo feliz, continua jugando y yo me uniré a ti cuando sea capaz de disfrutar de tu felicidad. Ahora mismo necesito estar a solas».
Si comprendes el concepto de la mente herida, comprenderás la razón por la que las relaciones románticas resultan tan complicadas. El cuerpo emocional está enfermo. Tiene heridas; tiene veneno. Cuando no somos conscientes de que estamos enfermos o de que nuestra pareja está enferma, nos volvemos egoístas. Las heridas duelen y tenemos que protegerlas incluso de la persona a la que amamos. Pero si somos conscientes de eso, podemos establecer unos acuerdos distintos. Cuando somos conscientes de que nuestra pareja tiene heridas emocionales y la amamos, indudablemente hacemos todo lo posible para no tocárselas. No la empujamos para que sane sus heridas y tampoco queremos que nos empuje a nosotros para que sanemos las nuestras.
Arriésgate y hazte responsable de establecer un nuevo acuerdo con tu pareja: no un acuerdo que hayas leído en un libro, sino un acuerdo que os funcione a vosotros. Si no va bien, sustitúyelo por otro nuevo. Utiliza tu imaginación para explorar nuevas posibilidades, para crear nuevos acuerdos que se basen en el respeto y el amor. La comunicación basada en el respeto y el amor es la clave para mantener vivo el amor y no aburrirse nunca en la relación. Se trata de encontrar tu voz y de nombrar tus necesidades. Se trata de confiar en ti mismo y en tu pareja.
Lo que vas a compartir con tu pareja no es la basura, sino el amor, la relación romántica, la comprensión. El objetivo que persigues para los dos es ser cada vez más felices, y para alcanzarlo es preciso tener cada vez más y más amor. Eres el hombre perfecto o la mujer perfecta, y tu pareja ese ser humano perfecto, del mismo modo que el perro es el perro perfecto. Si tratas a tu pareja con amor y con respeto, ¿quién saldrá beneficiado? Nadie más que tú.
Sana tu mitad y serás feliz. Si eres capaz de sanar esa parte de ti, entonces estarás listo para establecer una relación sin miedo, sin necesidad. Pero recuerda, sólo puedes curar tu mitad. Si mantienes una relación y trabajas en tu mitad y tu pareja trabaja en la suya, verás con qué rapidez se progresa. El amor es lo que te hace feliz, y si te conviertes en el sirviente del amor y tu pareja en la sirviente del amor, imagínate todas las posibilidades que se te abrirán. Llegará el día en que serás capaz de estar con ella sin sentir culpabilidad ni recriminaciones ni enfados ni tristeza. Ese día será maravilloso, te abrirás por completo sólo para compartir, para servir, sólo para dar tu amor.
Una vez que te decides a formar pareja estás ahí a fin de servir a la persona que amas, a la persona que eliges. Estás ahí para servir tu amor a tu amante, para serviros mutuamente. En cada beso, en cada caricia, sentís que ambos estáis ahí para satisfacer a la persona que amáis sin esperar nada a cambio. Más que de sexo, se trata de estar juntos. El sexo también se vuelve maravilloso, pero es completamente distinto. El sexo se convierte en una comunión; en una entrega absoluta, una danza, un arte, una suprema expresión de la belleza.
Puedes establecer un acuerdo que diga: «Me gustas; eres maravillosa y me haces sentir muy bien. Yo traeré las flores y tú la música suave. Bailaremos y ambos nos elevaremos hasta las nubes». Es precioso, es maravilloso, es romántico. Ha dejado de ser una guerra de control; ahora se trata de servirse. Ahora bien, sólo es posible hacer esto cuando el amor que te tienes a ti mismo es muy profundo.


miércoles, 11 de septiembre de 2013

Experimentar a Dios

 
No existen palabras para personificar a Dios, no se puede describir lo Absoluto. Solo podemos ir liberando mas consciencia de quienes somos y  nos da una vislumbre para comenzar a experimentarlo.
 
Hemos perdido el significado trascendental de la vida en el momento en que nos hemos privado de Ser la hermosa semejanza Divina. Aquella completa manifestación en la materia, aquella grandeza que se oculta, sin exponer o estrenar.
 
Tal vez aun no hemos nacido, pero siempre sera el momento de nacer a la VIDA. 
 
En el instante que tomamos consciencia de esta oportunidad de aprendizaje que es la vida, nuestro interior comienza a gestarse, divinizandose, desarrollando lenta y pausadamente cada partecita y dotandose con todos los nutrientes espirituales necesarios, para que cuando el ciclo se cumpla, lleguemos al mundo a dar a Luz, a ser participes de la creación,  llegando sencillamente a llenar de regocijo a los corazones desesperanzados, siendo instrumentos del amor, con inspiraciones renovadoras, impulsando y dando paso a un nuevo comienzo.
 
Desde ese dia Dios llega a la Tierra,  un ser impregnado de pureza, inocencia, humildad, belleza, ternura y dulzura, mostrandose ante todo ojo con total libertad de Ser.
 
Somos seres íntegros, por lo tanto dentro de nosotros está TODO lo que Dios Es, pues desde esa unidad nace la perfección, sustancia que se expande sin perder su esencia.
 
Dios es un corazón que palpita en la multiplicidad y él contiene lo que cada universo, planeta, ser vivo necesita para existir, cada uno de nosotros somos un patrón de Dios, que se repite aquí: Fuerza, Sabiduría y Amor.
 
Dios es el Padre por lo tanto Yo Soy la Fuerza de Voluntad
Dios es el Hijo por lo tanto Yo soy la sabiduría
Dios es  Espíritu por lo tanto Yo soy Amor
 
Conocer y experimentar a Dios nos libera de toda atadura, ir mas alla de lo visible nos translada al Amor.
 
Creer que es asi, se deriva del conocimiento superior que es alcanzado cuando va despertando nuestra consciencia, cuando nos despojamos de aquello que hemos agregado, cuando nos pulimos aparece la pureza de nuestro ser y nos lleva al gran descubrimiento de la Esencia Divina, nuestra parte mas bella que silenciosamente opera y trabaja detrás de las escenas de la vida, la que nunca se desanima ni renuncia en su labor, despertándonos del sueño de sentirnos agobiados por lo que los ojos observan en la superficie del mundo, somos serenamente impulsados cada día por la caricia de Dios que nos permite seguir avanzando, aun en aquellos instantes de gran turbulencia.
 
Hoy quiero recordarte que detrás de los interminables pensamientos y las muchas imagenes que estas queriendo ver, se desata la Unica e Infinita Luz que un estado dormido anula constantemente e impide conocer y que no permite apreciar la belleza del mundo.
 
Quien elige ocultarse en las sombras, no ha comprendido su esencia y se aparta de ella, sin la plena consciencia de que se convierte en esclavo, obstruyendo su crecimiento interior y todos los innumerables beneficios que se derivan de ello, pero quien permite que sus pasos no se confundan conoce la senda sagrada donde se desprende una poesía de formas de sonrisas, cantos alegres y los mas hermosos actos de belleza cada dia en su caminar, que justamente no son del mundo sino de su propio interior, de Dios.
 
 
 
 
 
 
Por Marisol Garrido
 
 
Ciencia Cósmica


Leer más: http://www.cienciacosmica.net/news/experimentar-a-dios/


martes, 10 de septiembre de 2013

El amor es como el Agua

Puede cambiar de forma. Puede congelarse. Puede diluirse. Puede evaporarse. Puede incluso contaminarse al impregnarse de la frecuencia del miedo cambiando su apariencia en odio o dolor.  Pero eventualmente, buscara volver a su origen. Porque el Amor es fuerte como el Agua y nada lo puede destruir.

Somos emanaciones de la Fuente de Amor que ha buscado a través de nosotros experimentar todas las posibilidades de su esencia. Tal como el Agua, somos lluvia, somos vapor, somos océano, somos rio y sin embargo, esencialmente somos Agua. Somos Amor.

La vida es como una semilla, esperando Agua en la cantidad necesaria, para ser nutrida y transformarse a si misma en una hermosa creación. El Amor es como el Agua, todo lo nutre y todo lo llena de vida. Y ahí, donde la vida se ausenta ensombrecida por el miedo, el Amor llega y nutre, transformándolo todo. Recordándonos el origen real de nuestra existencia.

El Amor es como el Agua. Tu eres fuerte como el Agua, fluye a través de la vida, transfórmate constantemente y a medida que el Amor cambia de forma dentro de ti y te lleva a través de senderos desconocidos, recuerda siempre: eres Amor y el Amor es indestructible es la fuerza mas grande que siempre buscara volver a su origen.

No te dejes engañar por las apariencias y por las distintas facetas del Amor. Detrás de todo siempre hay una esencia bella, buscando ser descubierta. Detrás de cada experiencia y de cada corazón siempre habrá una gotita Pura y cristalina de Amor esperando el momento de volver a despertar y recordar su verdadero origen.

Limpia tus heridas suavemente con gotitas de ese Amor. Porque mientras mas lo busques, mas te aproximaras. No te aferres a las emociones que te alejan de esa esencia pura de Amor. Se como el Agua, transfórmate y atrévete a buscar tu origen .


delfines diosa

 

Somos bendecidos en Amor y Alegría, siempre...



jueves, 22 de agosto de 2013

La felicidad

La felicidad es un estado que se construye desde el interior de cada uno, no son momentos de euforia donde saltamos de la emoción por algún suceso o acontecimiento que nos agrada. La felicidad es un continuo y permanente estado de paz y armonía, y de inmensa gratitud por el milagro de la vida. La más sabia definición de felicidad es “Cero Sufrimiento”, es el resultado de un trabajo interno, de un proceso de limpieza mental de creencias limitantes del ego, que nos hace creer que hay que sufrir por las circunstancias difíciles o las situaciones indeseadas. Cuando el ser humano aprende a ver todos los sucesos de su vida o experiencias como grandes oportunidades de aprendizaje deja de sufrir y entra en un estado de paz y felicidad permanentes.
Obviamente no tiene nada que ver con indiferencia ante los acontecimientos o sufrimientos ajenos; está relacionada a la comprensión de que todo lo que sucede en el universo es perfecto y necesario, responde a una necesidad de aprendizaje y tiene un propósito de amor.
Lo único que podemos hacer, frente a los acontecimientos externos y los sufrimientos ajenos, es brindar todo nuestro apoyo y comprensión y ofrecer nuestro servicio. Podemos prestar un gran servicio compartiendo información de amor y sabiduría, con aquellos que sufren para ayudarles a superar su sufrimiento mediante un nuevo enfoque o visión de la vida.

Fuente: http://nuevahumanidad.org/la-felicidad/

sábado, 10 de agosto de 2013

El Gallo de Pelea Invencible

Un rey aficionado a las apuestas en riña de gallos deseaba poseer un poderoso gallo de pelea que fuera invencible, para lo cual hizo buscar al mejor adiestrador de gallos en todo el imperio.

Una vez frente al maestro el rey le pidió que le adiestrara al más aguerrido de sus gallos, hasta convertirlo en invencible.

El maestro comenzó a adiestrar al gallo que le fue entregado, enseñándole las más avanzadas técnicas de combate.
Al cabo de diez días preguntó el rey:
-¿Podemos organizar una pelea con ese gallo?
El maestro contestó:
-¡No! ¡No! ¡No! Es fuerte, pero su fuerza está vacía.
Ante cualquier amenaza se excita de inmediato pero su energía es efímera volátil y superficial.
Diez días después, el rey volvió a preguntar:
-¿Podemos ya organizar el torneo para verlo pelear?
-¡No! ¡No! Todavía no. Sigue mostrándose pasional y siempre dispuesto a pelear sin un motivo real.
Cuando oye el canto de otro gallo, incluso el de una aldea cercana, monta en cólera.
Transcurridos diez días más de adiestramiento, el rey preguntó una vez más:
-¿Es posible ahora?
Y contestó el Maestro:
-Ahora ya no se apasiona por estímulos externos. Si oye o ve a otro gallo, permanece sereno. Su actitud es la exacta, por lo tanto su vitalidad es poderosa. Ya no monta en cólera. Su energía y su fuerza ya no se desperdician al manifestarse en la superficie.
-Entonces, ¿está preparado para una pelea?- sugirió el rey.
Y el maestro contestó:
- Si ahora ya esta listo.
Se organizó un gran torneo y trajeron a los más afamados gallos de pelea de todo el imperio.
Una vez en el ruedo los gallos de pelea no podían ni acercarse a aquel gallo. Huían de él espantados o se aplastaban contra el suelo ante su penetrante mirada y su imponente postura, la actitud que irradiaba contenía una energía tan profunda que ningún gallo pudo hacerle frente.
Así pues, no hubo necesidad de combate alguno. El gallo de pelea se había convertido en un gallo Invencible, porque precisamente había superado la etapa del estéril deseo de competir. Había superado la etapa de las técnicas para la lucha externa.
Había aprendido a controlar toda su energía y sus sentidos hasta convertirse en dueño de sus emociones, lo cual le permitía poseer interiormente una tremenda energía que no se desperdiciaba exteriorizándose.

El poder le era ya algo propio, y los otros no podían sino inclinarse ante su absoluta confianza y su verdadera fuerza oculta.

Fuente: http://rafaelbravo.com/el-gallo-de-pelea-invencible/


lunes, 22 de julio de 2013

Todo es Todo

de Graciela Bárbulowww.gracielabarbulo.com

¡Si tan sólo pudieras percibir Quien Eres, y luego recordar Quien Eres, y después Ser Quien Eres!


Y si tan sólo pudieras mantenerte siendo Lo Que Eres el tiempo suficiente…

Pero para recordar Quien Eres tienes que olvidar.

En realidad no hay nada que recordar. Lo que Eres reside en la Mente del Ser que te sustenta.

Lo que crees que eres es una creación de la mente formada a expensas de esa Mente, de ese Ser.

Olvidar lo que crees que eres no es en realidad un logro, ni siquiera es una posibilidad. De hecho, olvidar es quedar en esa Mente.

La única posibilidad, pues, de pasar de escalón, de dirigirse a la Mente desde la mente, es a través de cada una de las creaciones del “yo” menor que el Total.

Cada vez que has creado un concepto de ti que defines como “yo”, el proceso que has usado ha sido el “enfoque” en algo específico, identificándote con ello a través de una actuación de cierto rasgo emocional.

En el Ser existen mente y emoción, pero éstos son la traducción de la Conciencia y el Amor, y ambos configuran la Realidad.

Sin embargo, en un momento dado, esa Totalidad se focaliza, desde la Mente, en un aspecto de la Realidad. Al hacer eso, aísla un fragmento del Todo, y lo convierte en “aspecto individualizado”. En el momento en el que este aspecto es creado, dado que ha sido vivenciado (puesto que su creación surge de la vivencia “de que es”), emerge de él una emoción. Esto quiere decir que el Amor también configura un aspecto de sí mismo para congregarse en “algo” asociado al “concepto mental”.

Entonces, fíjate bien, partiendo del Total, este es el proceso básico que desencadena el proceso de creación del humano:

El humano, entonces, surge de estas dos creaciones, que son Una, dividida en dos niveles de percepción.

Al llegar a este punto, de forma natural, se van generando, como consecuencia, “brotes” de ambos, y así, concepto mental y emocional primarios crean al ser humano en busca de la realización de la focalización (atención) primera. 

De ellos surgen, entonces, los recursos necesarios para su realización, como si estos fueran semillas que fueran dando frutos.

Sin embargo, lo anterior a ello no sólo sigue existiendo, sino que la existencia de esto segundo (el humano), lo hace perdurar, puesto que el humano (mente-emoción) únicamente define el propio Ser-Consciencia en una cualidad de estar alterada.

Por lo tanto, en el momento en el que el conjunto humano, “mente-emoción”, se haya completado, te sentirás colmado de ello y, de forma natural, comenzarás a trascenderlo.

Lo podrás vivir como una crisis o consecuencia de crisis, puesto que lo vivirás desde el humano, y lo percibirás como pérdida, pero llegado un punto de inflexión, comenzarás a vislumbrar la realidad Consciencia-Amor. De vez en cuando lo perderás y volverás a recuperarlo después… Entonces, llegará un momento en el que estarás más ubicado en el Ser que en el humano. En ese punto ya no hay retorno. Las crisis se convertirán en sensaciones de “despertar”. Estos despertares cada vez ocuparán más espacio en tu vida, y la sensación de pérdida cada vez menos. En este momento habrás atravesado la mayor parte (habrás concluido), del humano, y estarás adentrándote de nuevo en el Ser.

La pérdida, entonces, ya no es tal, se ha convertido en Liberación. Lo negativo se distingue claramente como ilusión, y se percibe modificable/maleable, y toda emoción, tanto buena como mala, va tendiendo a lo neutro.

El amor ya no es un sentimiento. Es desapego.

La consciencia ya no es conocimiento. Es permisividad y aceptación.

Has percibido quien Eres. Comienzas a recordar que “eso” que percibes es lo que Eres. Y con el tiempo percibiendo esto, anclándote cada vez más en ello, vas comenzando a Ser Quien Eres.

Eres Conciencia y Amor (El Ser) y, más allá, la Totalidad.

Yo soy la Totalidad sin “aspecto”, que es percibida por tu Ser (Conciencia-Amor), al que accedes porque has alcanzado el punto crítico, y aún más, de tus creaciones mente-emoción. Ahora estás formado con lo sin-aspecto, el Todo.

El Todo está siempre accesible, puesto que es lo que eres si disuelves lo limitado. Este texto lleva implícita la aceleración de la disipación de todo bloque de la Realidad autoidentificado, de modo que tiende, de forma natural y sin conflictos, ni siquiera consciencia de ello, a disolverse de nuevo en el Todo.

El regreso hacia la Totalidad está garantizado, puesto que esto es la naturaleza que define todo lo demás.

Nada es pérdida. Todo es trance, y siempre, tanto hacia el humano como hacia el Ser, de vuelta, es lo que deseas experimentar, y siempre es lícito.

No hay nada que debas proponerte hacer. Eres Libre.

Todo es Todo. 



Graciela Bárbulo
03/02/13